Una vez fuera de Doriath, Lúthien se encuentra con Huan, un perro gigante de Valinor (del tamaño de un caballo pequeño) que el vala Oromë le entregó a Celegorm, uno de los hijos de Fëanor. Huor la lleva a Celegorm y su hermano Curufin que, recordemos, habían viajado al reino de Finrod Felagund después de que los ejércitos de Morgoth arrasasen sus reinos en la Dagor Bragollach. Los hermanos llevan a Lúthien a Nargathrond, donde Orodreth gobierna desde que Finrod partió junto a Beren. Celegorm se ha enamorado de Lúthien, y desea unir su familia a la de Thingol, así que le prohibe a la princesa elfa hablar con nadie más que con ellos.

Huan, de quien se ha profetizado que morirá en las garras del mayor de los lobos, avergonzado por los actos de su amo, va a donde Lúthien y le ayuda a escapar. Así, montada sobre el perro gigante, Lúthien escapa de Nargothrond y llega a la Isla de Sauron, donde Beren yace captivo yagonizante.

De hecho, oigamos al propio Beren en When Sorrow Sang [sí, ya sé que esto en realidad va más adelante, pero lo pongo aquí por repartirlo un poco]:

Lúthien llama a Beren cantando, y Beren piensa que es su imaginación. Pero Sauron también la oye, y envía a sus lobos uno tras uno. Huan los mata a todos, incluyendo al más grande de ellos, Drauglin, pensando que así se cumplirá la profecía de que el mayor de los lobos matará a Huan. Sauron decide salir en persona, transformado en un hombre-lobo aún mayor. Sin embargo, Huan lo derrota de todos modos, pese a las diversas transformaciones y poderes de Sauron. El lugarteniente de Morgoth se transforma en vampiro, y huye, entregando a Lúthien las llaves de la fortaleza.

Lúthien destruye la torre y libera a los prisioneros. Al encontrar a Beren tendido junto al cadáver de Finrod Felagund, lo da por muerto, pero Beren despierta al amanecer y los dos vuelven a reunirse. Entierran a Finrod en la isla, Huan regresa a buscar a su amo, y Beren y Lúthien vuelven por fin a estar juntos en los bosques de Brethil. Finalmente, Beren le pide a Lúthien que regrese a Doriath, diciendo que una princesa elfa no puede vagabundear por el bosques con un humano, como bandidos. Tinúviel se niega, y le confiesa a Beren su amor inmortal.

Entre tanto, Orodreth ha expulsado a Celegorm y Curufin de Nargothrond, y los dos, junto a Huan. Los tres se dirigen a Himring, la fortaleza de Maedhros, a reunirse con sus hermanos. Encuentran a los dos amantes en el instante en el que se abrazan, y deciden atacarles. Pero Huan se vuelve contra sus amos de nuevo, y los hermanos se rinden. Beren se lleva Angrist, el cuchillo de Curufin. Pero éste dispara a traición a Lúthien, a quien culpa de sus males. Beren se interpone en la trayectoria del proyectil y es herido. Lúthien consigue curar a Beren con su magia, y los dos se disponen a continuar su viaje mientras los otros dos huyen.

Transformada Lúthien en Thuringwethil, un vampiro al servicio de Morgoth, y disfrazado Beren con la piel del lobo Drauglin, los dos se abren camino hasta la terrible fortaleza de Morgoth, Angband. El plan de entrar de esa manera se tuerce cuando Carcharoth, un terrible lobo negro que Morgoth y Sauron con el único propósito de destruir a Huan, les reconoce y ataca. Lúthien usa su magia para adormecerlo, y los dos entran finalmente, con sus disfraces, en Angband.

Llegan hasta el mismísimo trono de Morgoth, donde se reúnen el señor oscuro y su corte. Morgoth ve a través de la magia de Lúthien, y la reconoce y desnuda. Antes de que la mate, la princesa de Doriath se ofrece a cantar y bailar para él. Morgoth, lleno de malvada lujuria y deseo hacia Lúthien, le insta a hacerlo.

La elfa canta, y gracias al poder heredado de su madre, lanza un encantamiento. Todos Angband cae dormido, incluyendo al propio Morgoth. Es el momento clave, y Beren sale de su escondite tras el trono y usando Angrist, el cuchillo que le quitó a Curufin, arranca el primer Silmaril de la Corona de Hierro de Morgoth. Así logran Beren, heredero de la Casa de Bëor, y Lúthien Tinúviel, princesa de Doriath, recuperar un Silmaril de Morgoth.

Después Beren empieza a soltar un segundo Silmaril, pero la hoja se rompe, araña a Morgoth en la mejilla, y éste despierta. Beren suelta el cuchillo y Lúthien y él salen por patas, antes de que los ejércitos de Morgoth salgan del encantamiento.

A la salida de Angband, el lobo Carcharoth está despierto y les ataca antes de que a Lúthien le dé tiempo a usar su magia de nuevo... y cuando Beren trata de defender a Lúthien, usando el Silmaril para atraer la atención del lobo, éste lanza sus fauces a por la joya, comiendose tanto la joya como la mano de Beren.

El Silmaril quema a Carcharoth por dentro y, dolorido, huye, dejando tras de sí a Lúthien con un malherido Beren y todas las hordas de Angband pisándoles los talones. Lúthien intenta sacar con sus labios el veneno de los colmillos, pero su poder no es suficiente para salvarle la vida. En ese momento llegan las águilas de Manwë (siempre tan oportunas), a las que había llamado Huan, y les salvan en el último instante.

Llegan así Lúthien y Beren de vuelta a Doriath. Una vez curado de sus heridas, el humano se presenta ante Thingol, quien le pregunta si ha cumplido su gesta. Beren dice que sí... que tiene el Silmaril en la mano. Thingol le pide verlo, y entonces Beren le muestra su muñón. Tras escuchar toda la historia, el rey sindarin decide que Beren está por encima de los mortales comunes, y casa a los dos ese mismo día, frente a su trono.

Esto sería un buen final feliz, de no ser porque Carcharoth, con el Silmaril quemándole las entrañas, corre salvajemente hacia el sur, aterrorizando a elfos, hombres y orcos por igual. En su locura, llega a las lindes de Doriath, donde aterroriza a los elfos. El rey Thingol en persona parte a la cacería del lobo, acompañado por sus mejores guerreros, entre ellos Mablung de la Mano Pesada, Beleg Cúthalion "Arcofuerte" (de quien sabremos más la semana que viene), Beren (ahora llamado Erchamion, el manco) y Huan, el mastín de Valinor. Carcharoth les asalta de imprevisto, y aunque Huan consigue matarlo, también mueren él (como se había profetizado) y Beren. Mablung abre las tripas del lobo, y recupera el Silmaril para Thingol.

Beren es llevado de vuelta a Menegroth, donde muere en los brazos de Lúthien.