Un nuevo número de una de las mejores series de cómics de Star Wars hasta la fecha. El octavo tomo, de un total de once, de Legado nos lleva de vuelta a donde empezó todo: Tatooine. Como es habitual, nos hallamos ante un número imprescindible para cualquier fan, con un gran guión, un dibujo impresionante... y unos errores garrafales en la traducción.
Tatooine no es que sea la historia más relevante de todas las que componen Legado, pero ciertamente aquí se están plantando ya semillas de lo que serán los tres últimos tomos. Empezamos con un Cade Skywalker desligado de los eventos de la galaxia, y que se está dedicando a la piratería y la estafa junto a Jariah Syn y Deliah Blue. Mientras tanto en Coruscant, Nyna Calixte envía a su alter ego Morrigan Corde y a su hija Gunner Yage a Tatooine, mientras Darth Wyyrlok juega su siguiente carta para mantener el Imperio en pie tras la muerte de Krayt que aún se mantiene en secreto.
Para cuando uno se da cuenta Gunner ha capturado a su hermanastro Cade, Jariah y Morrigan ahondan en su "relación", Deliah se infiltra en la Misión Imperial, y tres asesinos de Sol Negro van a por ellos. Si digo que Tatooine incluye un duelo entre Cade Skywalker y su ancestro Luke Skywalker, no hay mucho más que hablar. Finalmente, después de la historia principal, hay una protagonizada por Hondo Karr, un secundario al que vimos en Fragmentos como parte del escuadrón Joker imperial y en Alianza como parte del Escuadrón Pícaro, y a quien ahora veremos volviendo a contactar con sus raíces mandalorianas. Aunque lo de los mandalorianos promete, desgraciadamente es un hilo que la serie no vuelve a seguir, así que es algo que se quedará en el aire.
Finalmente, no puedo cerrar la reseña sin mencionar esos insistentes fallos de traducción que se deben a un pobre conocimiento o investigación de SW por parte del traductor. Algunos no son tan graves, como poner wookie en vez de wookiee, o hablar del Ord Mantell en vez de de Ord Mantell. Pero hay otros que me parecen peores:
-Si a Luke Skywalker no le llamamos Lucas Caminacielos, a Deliah Blue no le llaméis Deliah Azul. Y aun si lo hicierais... que hubiera sido desde el principio de la serie. No tiene sentido que en medio de Legado los traductores de Planeta decidan cambiarle el nombre.
-Pase que no esté bien definido si el plural es mon calamari o mon calamaris. Pase que a veces el plural de hutt sea hutt y otras hutts - pero habría que ser consistente, porque en el mismo bocadillo se usan ambas formas para el plural. Pero lo que es de cajón es que el plural de Sith es Siths. ¿Episodio III: La venganza de los Siths?
-Si al Rogue Squadron le llaman Escuadrón Pícaro en las películas y en la mayoría de libros y cómics (exceptuando las novelas de Ala-X)... en los cómics también tendría que ser Escuadrón Pícaro. Y no Escuadrón Rebelde.
-Si al final del tomo pones una "Cronología de las novelas gráficas de La guerra de las galaxias", genial. No aparecen Purga ni El poder de la Fuerza... bueno. Pero que de 14 títulos, 6 no concuerden con cómo se publicaron es ridículo. ¿Caballeros de la vieja República? El videojuego no se llama así, ¿no? ¿La guerra de la galaxia (clásicos) para referirse a Devilworlds? ¿El Imperio siniestro en vez de Imperio Oscuro?
En fin, pese a todas esas barbaridades, el libro es muy bueno y recomendable, así que merece una buena nota.
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on domingo, enero 29, 2012
at 12:36
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