El álbum está acabando ya, y con él la Primera Edad. Sólo queda una canción, así que será una entrada especial para poder contar todo lo que queda.

Tras la Quinta Batalla, contamos las vivencias de Túrin Turambar y su hermana; y después vimos como Húrin era liberado por Morgoth, traicionaba involuntariamente la situación de Gondolin, y recuperaba el tesoro de Nargothrond para entregárselo a Thingol.

El rey de Doriath tiene ante sí el collar Nauglamír, la más bella joya de Nargothrond, forjada por los enanos. Anonadado ante su belleza, contrata a enanos de Nogrod para que reforgen el Nauglamír, con el Silmaril que trajeron su hija y su amado desde Angband. Se forja así la joya más bella vista jamás en Beleriand - el Nauglamír de los enanos con el Silmaril de Fëanor, y en él la luz de los dos Árboles.

Pero la codicia crece alrededor de este objeto, y los enanos lo exigen como pago por sus obras. Thingol, obsesionado con su nueva joya, teme que lo único que quieren los enanos sea el Silmaril, y los expulsa de Doriath sin pagarles nada, gritándoles que él fue el primero entre los eldar en hacer el Gran Viaje, y que no pueden exigirle nada, dado que son sus invitados. En venganza los enanos de Nogrod y su rey Naugladur pasan a la acción, matan al Alto Rey de Beleriand, y vuelven a las Montañas Azules con el Nauglamír y el Silmaril, y muchos de los tesoros de Doriath.

Sin embargo en Ossiriand, caen en una emboscada. Beren y su hijo Dior lideran a los elfos verdes en un ataque contra los enanos. Beren en persona mata a Naugladur, y los enanos que huyen caen en manos de los ents. Finalmente, Beren entrega el Nauglamír a Lúthien, y arroja el resto del tesoro al río. Durante el último año de su vida, Lúthien vuelve a portar el Silmaril que robaron a Morgoth, y con el Nauglamír vuelve a ser la criatura más bella sobre la Tierra Media.

Entre tanto, Dior Eluchíl, en cuyas venas corre la sangre de los hombres, de los elfos y de los maia, parte con su familia a Menegroth, donde, como nieto de Thingol, es coronado Rey de Doriath - Melian ya no está, pues ha abandonado la Tierra Media tras la muerte de su esposo. Meses después, sus padres mueren como mortales, y el Nauglamír le es enviado. Así, el Silmaril vuelve a Doriath y, durante unos pocos años, la gloria de Doriath es restaurada.

Sin embargo, las noticias de que el Dior tiene el Silmaril llegan a los Hijos de Fëanor, que están viviendo en Ossiriand. Mientras estuvo en manos de Lúthien, ninguno se atrevió a hacer nada, pero ahora algunos empiezan a querer hacerse con él. Obligados en cierto modo por su pacto, pretenden atacar Doriath. Maedhros les refrena, y envía un mensaje a Dior... que éste ignora. Entonces Celegorm convence a sus hermanos y a sus seguidores de que deben hacerlo por la fuerza.

Sucede así la lamentable Segunda Matanza de los Hermanos, o el Saqueo de Doriath. Los Hermanos llegan en invierno y la batalla se extiende por las mil cavernas de Menegroth. Es la segunda vez que elfos matan a elfos, y Celegorm, Curufin y Caranthir caen. También mueren Dior y su esposa Nimloth, y sus dos hijos son abandonados a su suerte en el bosque. Después Maedhros se arrepentirá de esto y los buscará, sin suerte.

Así cae el reino de Doriath, pero Maedhros, Maglor y Amrod no obtienen lo que buscan... y es que entre los que han huido de Menegroth ante el ataque se encuentra Elwing, la hija de Dior, quien porta el Nauglamír. Los terribles actos del Saqueo de Doriath y la maldición que pesa sobre los noldor es comparable a la que perseguía a Túrin Turambar. Harvest of Sorrow (live)

Pero no es ésta la última tragedia que sucederá a los noldor. Y es que como ya vimos hace semanas, Gondolin también cae. Maeglin, hijo de Eöl el elfo oscuro, celoso por el amor entre el humano Tuor y la elfa Idril, es capturado por Morgoth, que gracias a Húrin sabe dónde buscar Gondolin. Maeglin abre las puertas del reino oculto a los orcos.

Sucede una de las más terribles batallas de todas, en la que caen muchos héroes de los elfos, y el Alto Rey Noldor Turgon muere también. Tuor e Idril, llevando a su recién nacido, Eärendil, guían a todos los que pueden por un camino secreto que sale de Gondolin. El valiente Glorfindel cae para derrotar a un balrog que les perseguía; y Ecthelion de la Fuente derrota a Gothmog, señor de los balrogs, defendiendo a Tuor. Ambas hazañas serán recordadas siempre por el pueblo élfico, al igual que la épica batalla de Fingolfin con Morgoth en Time Stands Still at the Iron Hill (live).

A toda esta tragedia le siguen unas décadas de paz. El lugar conocido como las Bocas del Sirion se convierte en el nuevo bastión de los elfos. Construyen muchos barcos, gracias a lo cual se mantienen en contacto con la cercana Isla de Balar, donde se han refugiado Círdan y los supervivientes de Falas. En Bocas del Sirion se reúnen los refugiados de los últimos tres reinos élficos: Nargothrond, Doriath y Gondolin. También acuden humanos de toda Beleriand. Tuor e Idril se convierten en gobernantes de Bocas del Sirion. También vive con el resto de los exiliados Ereinion Gil-Galad, hijo de Orodreth, y el que es el último Alto Rey Noldor, tras la muerte de Turgon.

Durante los siguientes años, Earëndil, hijo de Tuor e Idril, y Elwing, portadora del Silmaril, contraen matrimonio. 22 años después de la caída de Gondolin nacen sus hijos Elrond, que elegirá la vida de un elfo, luchará en las batallas de la Segunda Edad, y será una pieza clave en la lucha contra Sauron en la Tercera Edad; y Elros, que elige ser un hombre mortal, fundará el reino de Númenor, y la línea de sus descendientes pasa por Elendil e Isildur y llega a Aragorn.

Eärendil se convierte en señor de Bocas del Sirion cuando Tuor siente la "llamada de Ulmo" y parte en un barco con Idril para no volver a ser visto jamás. Eärendil, ayudado por Círdan, construye un barco que se llama Vingilótë y se dedica a hacer largos viajes y explorar el océano. Se ha convertido en el líder que cuida del último refugio de los elfos, algo que nos recuerda a Turgon cuando Ulmo le instó a construir Gondolin en Mirror Mirror (live).

Pero como viene siendo costumbre, los noldor no pueden disfrutar de muchos años seguidos de paz. Y el viejo Juramento de Fëanor no ayuda. Por tercera y última vez, los elfos luchan contra los elfos, cuando los los Hijos de Fëanor atacan Arvernien en las Bocas aprovechando que Eärendil está en uno de sus viajes. Pero una vez más no obtendrán el Silmaril, ya que antes de entregárselo, Elwing se arroja al mar. Ulmo, que "pasaba por ahí", la salva y la lleva con Eärendil.

Elrond y Elros son capturados durante esta Tercera Matanza, pero Maglor se apiada de ellos, y decide cuidarlos y criarlos durante los siguientes años. De los siete hermanos, sólo quedan Maedhros y él. Es el momento más trágico de la historia de los noldor, con sus reinos destruidos, sus manos manchadas de sangre hermana, y con Morgoth habiéndose apoderado de toda la Tierra Media. Blood Tears (live).

En el Vingilótë yace la última esperanza de los elfos y hombres de Beleriand. Elwing lleva consigo el Silmaril, y Eärendil, al saber del saqueo de Arvernien, toma una última decisión: navegar hacia el oeste en busca de Valinor, algo que ningún mortal ha conseguido antes. Los dos son descendientes de hombres y elfos, y, con una petición en nombre de las dos razas, parten hacia poniente, guiados por la luz del Silmaril, retornando una de las tres joyas que causó que Fëanor y los noldor emprendieran su juramento hace más de 500 años. Nightfall (live).

Asombrados y conmovidos por las acciones de Eärendil y Elwing, y por la unión de elfos y hombres, los valar deciden finalmente intervenir.

Los vanyar y los noldor que se quedaron en Valinor navegan sobre los barcos de los teleri, de vuelta a la Tierra Media. La hueste desembarca y cruza Beleriand hasta llegar a Anfauglith, la devastada llanura que otrora fuera el verde Ard-galen. Las tres casas de los eldar luchan junto a los valar, así como las tres casas de los edain, y los orcos caen a centenares. Mueren los hombres que Morgoth había llevado a su lado, y mueren casi todos los balrogs, excepto unos pocos que huyen y se esconden en las profundidades (como uno que todos sabemos). Morgoth desata su arma definitiva, un ejército de dragones, con su nuevo líder Ancalagon el Negro, pero éstos también son vencidos por los valar; y cuando Eärendil regresa junto a las águilas, derrotan a Ancalagon y en su caída derrumba las torres del Thangorodrim.

Morgoth sabe que llega su final. Volvemos así al principio de la historia: Into the Storm (live).

Encuentran a Morgoth escondido en lo más profundo de su fortaleza. Es capturado, encadenado, y arrojado al vacío más allá del mundo.

Tras la guerra, Beleriand ha quedado devastada. Todas las tierras al oeste de las Montañas Azules están devastadas, y la mayoría acaban sumergidas bajo las aguas. La región que se mantiene en la superficie es la que en los mapas de la Tercera Edad vemos como Lindon (en algunos como Forlindon y Harlindon). También quedan algunas islas, como Tol Morwen, donde están enterrados Túrin, Nienor y Morwen; Himring, la que fue fortaleza de Maedhros, se convierte en Himling; y parte de Dorthonion sobrevive como Tol Fuin. En este mapa podéis ver Lindon y Himling.

La mayoría de los elfos supervivientes son aceptados de vuelta en Valinor. Pero hay muchos que, por diversos motivos, eligen viajar al este y permanecer en la Tierra Media. Entre los señores de estos elfos se hallan Elrond, hijo de Eärendil, Gil-Galad, Alto Rey Noldor, y Galadriel y Celeborn.

Como recompensa a los edain, los valar crean la isla de Andor, donde Elros crea el reino de Númenor, una de las mayores potencias de la Segunda Edad.

Así pasamos a la Segunda Edad de la Tierra Media. Surgirán más reinos además de Númenor. Los propios hombres de Númenor fundarán Arnor, Gondor y Umbar. Galadriel y Celeborn gobernarán Lothlórien; Celebrimbor, nieto de Fëanor, gobernará Eregion y forjará los Anillos de Poder; y Gil-Galad vivirá con Círdan en Lindon, y además creará, junto a Elrond, Rivendel o Imlandris. Además, está el reino élfico del Bosque Verde. Varios de los reinos de los enanos están en decadencia, pero crean la enorme y prodigiosa Khazad-Dhûm. Finalmente, surge también el reino de Mordor, cuando el esbirro de Morgoth Sauron sale de las sombras, crea el Anillo Único y se convierte en el nuevo Enemigo.

Pero, ¿qué ha sido de los Silmarils? Uno de ellos lo sigue llevando Eärendil, que navega eternamente, y el Silmaril brilla como una estrella al alba. Los otros dos, aunque los valar los recuperaron de la corona de Morgoth, son robados por Maedhros y Maglor. Al ser indignos y por sus actos malvados, las joyas les queman las manos. Maedrhos se arroja a una sima de la tierra, donde muere con el Silmaril. Maglor, el último de los Hijos de Fëanor, arroja el Silmaril al mar y vaga eternamente por las costas de la Tierra Media, lamentándose y arrepintiéndose de todo lo que han hecho.

Sin embargo, aunque el disco haya acabado, aún queda más que contar. Así que la semana que viene no te pierdas la última entrada de esta serie: la Tercera Edad.